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Cada fabricante de la parrilla del Campeonato del Mundo MOTUL FIM Superbike está buscando mejoras para ensamblar el mejor paquete posible de moto y piloto, y Kawasaki no es una excepción. La marca japonesa busca recuperar el Campeonato de Fabricantes y el Campeonato de Pilotos que ganaron por última vez en 2020. Parte de este proceso pasa por llevar a las pistas un nuevo motor mejorado, con el objetivo de optimizar la aceleración en las curvas.

EL PROCESO: Cómo funciona una especificación de motor actualizada

La mejora con que contarán Jonathan Rea (Kawasaki Racing Team WorldSBK) y su compañero de equipo Alex Lowes incluye un sistema variable de admisión de aire (Variable Air Intake) que utiliza una serie de pipetas de admisión móviles para modificar su altura, diseñadas para mejorar el rendimiento a diferentes niveles de rpm. A un nivel de revoluciones más alto, estos embudos de admisión se elevan y el aire de admisión se desvía del sistema, mientras que cuando están en sus posiciones más bajas mejoran el rendimiento de rango bajo y medio. Para maximizar el rendimiento a todas las velocidades, el movimiento de los embudos es monitoreado y regulado por servos.

 Comentando esta actualización, el director del equipo Kawasaki Racing Team WorldSBK, Guim Roda, detalla: "Debido a que las reglas del Campeonato no permiten dar ciertos pasos en las motos de competición, los fabricantes deben trabajar en las motos de producción en serie para hacer actualizaciones necesarias para un mejor rendimiento en la pista. Kawasaki usó la moto base, introdujo ciertos cambios en esa moto, hizo una especificación de motor actualizada y, con esto, puede competir en el Campeonato”.

“Nuestra moto es bastante buena por lo que respecta al chasis. Tenemos que mejorar un poco por el lado del motor. No porque el motor en sí no pueda funcionar mejor, pero de acuerdo con las reglas del Campeonato, nuestra moto de producción en serie es una moto de respuesta muy suave, con muy buenas sensaciones en la carretera. A veces, en las carreras necesitamos algunos ajustes en la puesta a punto en el motor. Sabemos muy bien lo que tenemos que hacer para realizar esta actualización en el motor pero, de acuerdo con las reglas, no podemos hacerlo, por lo que debemos trabajar más en la de producción en serie”.

EL RESULTADO EN PISTA: ¿Cuál será la diferencia?

Roda explica por qué el fabricante japonés decidió realizar estos cambios en la ZX-10RR y cómo beneficiará a Rea y a Lowes a lo largo de 2023, una campaña en la que aspiran a recuperar los títulos que conquistaron por última vez en 2020. Rea ganó seis carreras en 2022, el menor número desde que se unió a Kawasaki en 2015, cuando ganó nueve. Lowes obtuvo cuatro podios, menos de los que cosechó en 2021 e igualando los firmados en 2020 en su primera temporada con Kawasaki.

Explicando el posible alcance de los cambios, Roda apunta: “No sabemos exactamente cuánto vamos a ganar con eso porque, al final, es algo que necesitamos poner en marcha y entender cómo aprovechar su beneficio. Pero creo que vamos a conseguir una moto con un control más suave y un motor más fácil para salir de las curvas con un poco más de aceleración. Veremos si esto nos puede dar una pequeña ventaja respecto al año pasado, sobre todo porque la combinación de una Ducati potente con el peso de Bautista hace que sea complicado ganar esas dos o tres décimas que él se lleva solo en la recta. Necesitamos minimizar esa diferencia en todas las restantes curvas, así que veremos si podemos hacerlo. Al mismo tiempo, hemos de mantener el mismo nivel de aceleración que tienen Yamaha y Toprak. La velocidad máxima es una consecuencia de la aerodinámica y también de la aceleración en la salida de la curva. No es solo potencia. Vamos a ver si podemos minimizar esa diferencia este año”.

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